¿Alguna vez te has sentido como que necesitas "más de ti" para poder lograr terminar un proyecto importante o alcanzar tus sueños? ¿Alguna vez te has dicho: "Si yo tuviese más poder de voluntad, mejor autoestima o más disciplina yo estuviera logrando más en mi vida"? Hace poco tiempo tuve una sesión con uno de mis clientes de coaching. Aunque ella me dio permiso para compartir parte de su historia, vamos a llamarla Marie. Tiene 37 años de edad y se considera introvertida y tímida. Marie tenía la meta de crear su propio negocio en el internet. Esta meta estuvo siendo la #1 en su lista de resoluciones de nuevo año, pero por alguna razón se mantuvo siendo empujada para el próximo año y el próximo y el próximo. ¿Te ha pasado algo parecido? Cuando le pregunté el por qué esta meta era importante para ella, podías ver su rostro brillar de pasión como si de repente se le había olvidado que era "tímida". Lo principal de la conversación continuó de esta forma: Edward: “¿Qué crees que te ha impedido lograr esta meta por varios años?” Marie: “No sé … quizás no soy suficiente para lograrlo.” Esto estaba muy por debajo de la realidad. Marie es una mujer talentosa con una gran posición en una reconocida corporación multinacional. Se graduó de Administración de Empresas e inclusive, ya ha trabajado en Internet Marketing. Ella ya posee suficiente conocimientos para comenzar su negocio en el internet y ser exitosa. Edward: “¿Cuál ha sido el mayor desafío que has tenido que enfrentar en tu vida?” Ella se mantuvo en silencio por un largo rato, respiró profundo… Marie: “Nunca se me olvida que cuando tenía ocho años de edad mi padre se emborrachaba y empezaba a golpear a mi mamá. Esto sucedía como dos o tres veces al mes. El era fuerte, medía como 6'-4" y pesaba como 260 libras. Mi mamá, ya siendo frágil, no sabía como defenderse.” Edward: “¿Cómo reaccionabas?” Marie: “Algunas veces me iba a una esquina en la sala, cubriéndome los ojos y oídos como para no ser testigo de lo que estaba pasando, pero por lo general saltaba a las espaldas de mi padre tratando de que parara. Otras veces me lanzaba arriba de mi madre para ser yo quien tomara el abuso. Con frecuencia el paraba cuando yo hacía eso.” Edward: “Eres increíble, Marie. Ahora que eres mayor, ¿qué cualidades piensas que siendo una niña de ocho años tenías que tener para poder enfrentar esa situación de la forma que lo hiciste?” Marie: “Atrevida.” Edward: “¿Cómo así?” Marie: “Yo era sólo una niña en frente de este abusivo gigante. El saltar a su espalda para tratar de detenerlo o ponerme entre él y mi madre era para llevar la de perder, pero no me daba por vencida y gritaba bien alto hasta que mis pulmones no dieran más.” Edward: “…y sin embargo eso de que fuese una batalla para llevar la de perder no fue suficiente como para que no trataras de hacer algo. ¿Qué otras cualidades tenía esa niña de ocho años que le ayudó a atreverse de esta forma?” Marie: “Enfrentaba sus miedos y tomaba riesgos. Persistente. Resilente. No permitía que el tamaño del desafío la detuviera de hacer lo que ella sabía que era lo correcto hacer.” Edward: “¡Increíble! Y ahora que te das cuenta que desde que eras niña ya eras alguien que tomaba riesgos, quien defendía lo que era correcto hacer, quien saltaba y tomaba acción sin importar el tamaño del desafío, alguien, quien en contra de toda las posibilidades, dio 100% de lo que tenía y más, ¿Cómo puedes usar estas cualidades para ayudarte a crear el negocio online que sueñas?” Noté el rostro de Marie brillar de nuevo. Su negocio, que por cuatro años estuvo sólo en papel, ya ha sido lanzado y todo indica que será un gran éxito. Marie se dio cuenta que lo que pensaba que no tenía, ya lo poseía, y quien pensaba que no era, ya era. A la luz de lo que pasó con Marie, cuando piensas en tu pasado, ¿qué desafíos exitosamente enfrentaste? ¿Qué cualidades demostraste tener que hoy puedes usar para crear tu mejor futuro? No tiene que ser tan dramático como el de Marie. Muchas veces el desafío pudo ser el haber terminado la universidad, comprar tu primera casa o enfrentar una situación financiera. Mientras la respuesta para tu mejor futuro es lo que hagas en el presente, como actúes ahora está determinado por quién piensas que eres hoy. Cómo has enfrentado desafíos en tu pasado puede revelarte las cualidades que ya posees y que te olvidaste que tenías. Úsalas sabiamente y mírate brillar … de nuevo. In-Podérate!